Una supuesta transferencia de la administración del estadio Alejandro Serrano Aguilar al Deportivo Cuenca, así como su remodelación y ampliación, dieron cabida a que se luzcan los políticos. El gobernador del Azuay, Humberto Cordero, y el alcalde de Cuenca, Paúl Granda, participaron ayer en los diferentes programas deportivos radiales de la ciudad.
Todo empezó la noche del viernes pasado, cuando los directivos cuencanos entregaron una camiseta del ‘Expreso Austral’ al presidente Rafael Correa, en su visita a Cuenca. En su discurso, el candidato supuestamente ofreció que “pase a poder del Deportivo Cuenca” la administración del estadio, como lo informó el club.
Sobre el particular, Cordero aclaró que el Presidente “no ha dicho transfiérase el estadio; lo que sí se dijo es que vaya todo el apoyo para Deportivo Cuenca”.
Granda, por su parte, contó que hace unos seis meses se logró el apoyo del Ministerio del Deporte para la ampliación del escenario. En radio Ondas Azuayas sostuvo que “la idea es empezar la reconstrucción del estadio no más allá del quinto mes de este mismo año”.
La Federación Deportiva del Azuay (FDA), administradora del estadio, reaccionó ante la supuesta transferencia. Su presidente, José Verdezoto, recordó la vigencia de la Ley del Deporte y citó los artículos 140 y 144. Allí se resume que es imposible que un inmueble público pase a una entidad privada.
Julio León, ex presidente del club, en su cuenta de Twitter (@lioleo15) escribió que está semana se reunirán con Granda para viabilizar lo dicho por Correa: “el estadio será para el Dep. Cuenca”.
Montos y comodato La inversión será de entre USD 12 y 15 millones. Si se elimina la pista atlética, su capacidad será para 23 000 personas. La Federación Deportiva del Azuay firmó un contrato de comodato del estadio por 30 años, que rige a partir del 2011.
