“Quiero hacer un estadio tan grande como mi pasión”, sorprendió Julio León al final de su discurso con el que puso fin a sus cuatro años de gestión como presidente del Club Deportivo Cuenca. Acotó que en los próximos días empezarán a discutir el proyecto que esperan, cuente con el apoyo de las autoridades locales y gubernamentales.
Con el estadio se dará un salto de calidad en lo institucional, dijo tras recalcar que no se trata de una utopía. Saben por qué podemos lograr eso… porque este año la pasión es roja, enfatizó León ante alrededor de 150 personas que se dieron cita al auditorio del Colegio de Ingenieros Civiles del Azuay (C.I.C.A.) para la posesión de la nueva directiva colorada, encabezada por Fernando Muñoz y Hermel López, en calidad de presidente y vicepresidente, en su orden.
En el informe de sus cuatro años como autoridad máxima del club, León señaló que redujo al 50% la deuda de cuatro millones que recibió cuando se hizo cargo del Cuenca, en 2008. Resaltó como fortalezas la venta de jugadores como: Walter Chalá, Jhon Narváez, Juan Govea, Edison Preciado y Juan Paredes.
Aclaró que esos ingresos no hubiesen sido posible de no contar con técnicos que supieron dar oportunidad a los jóvenes y nombró como referentes a Guillermo Duró, Paúl Vélez y Luis Soler. También habló del cambio de imagen que le dio al Complejo de Patamarca.
En lo futbolístico se quedó con la temporada 2009 cuando disputó la final frente a Deportivo Quito y cumplió una campaña memorable en Copa Libertadores con un triunfo a Boca Juniors de por medio. El cambio generacional de jugadores y las lesiones fueron los factores, que según señaló, no permitieron alcanzar los objetivos en los años subsiguientes.
En su alocución, Fernando Muñoz expresó su compromiso a trabajar por el club e invitó a todos los presentes a unirse para se cumplan los objetivos trazados. reciba al instante las ultimas noticias en su email, subscribase