Este último partido fue un fiel reflejo de lo que representó el equipo de los camisetas coloradas durante todo el año. Un inicio para olvidar sin ganar nueve partidos y una finalización igual de pésima o quizá más, terminó doce fechas sin ganar.
A pesar de que hace fechas estaba "aparentemente" fuera de peligro, su campaña, que terminó siendo la peor de la segunda etapa, mostró argumentos suficientes como para irse de la serie A.
Además tiene la valla mas vencida del campeonato ecuatoriano de fútbol, a pesar de que a ratos mostraba una defensa segura, su falta de jerarquía se mostró en varios partidos.
Rivarola y Frías, dos técnicos que a pesar de que prestaron sus servicios al equipo, no mostraron las credenciales suficientes para sacar a flote este cuadro que a decir de la dirigencia en este año se armó para ser campeón.
Una campaña para olvidar, la hinchada al final del partido gritaba consignas contra los directivos pidiendo su salida de la institución.
fuente: elmorlaco.com.ec