El 17 de julio del 2014, el Ministerio del Deporte solicitó formalmente a la Municipalidad de Cuenca la donación del terreno en donde se emplaza el estadio Alejandro Serrano Aguilar, para iniciar los trabajos de remodelación total del escenario deportivo.
La remodelación del principal escenario deportivo de esta ciudad es porque Ecuador será sede de la Copa América del 2023. Ante eso, el Gobierno Nacional a través del Ministerio del Deporte tiene el proyecto casi listo para ejecutarlo.
En dicha Cartera de Estado se informó que el proyecto se encuentra en revisión por parte de la Municipalidad de Cuenca y que el costo de la obra será de 45.000.000 de dólares.
El primer acuerdo al que se llegó con la anterior administración local fue que el 50 por ciento invierta la Municipalidad y el otro 50 por ciento el Ministerio, y que los trabajos debían iniciar a mediados de este año, según declaraciones del exalcalde Paúl Granda en la campaña electoral.
Sin embargo, y con el cambio de administración, eso quedó en “stand by”. Ahora, el Ministerio del Deporte quiere viabilizar el proyecto y para eso hizo nuevas propuestas. La primera, que el Gobierno Nacional invierta todos los recursos en la remodelación, pero que a cambio la Municipalidad entregue el estadio al Ministerio del Deporte. La segunda opción es que se mantenga el 50 por ciento de inversión del Estado y la otra mitad la Municipalidad.
De pasar el predio a nombre de dicha Cartera, esta invertirá un total de 53.316.000 de dólares para remodelar el escenario deportivo; de eso, 45.000.000 de dólares será para los trabajos, 5.400.000 por el Impuesto al Valor Agregado, 2.016.000 para la fiscalización y 900.000 dólares en gastos administrativos. La obra estará al cargo de la Servicio de Contratación de Obras, SECOB.
Por Ley, todos los escenarios deportivos son administrados por las distintas federaciones. En el caso del estadio cuencano, la Federación Deportiva del Azuay, FDA, tiene un comodato por uso de las instalaciones por 30 años, con el propósito de garantizar el fin para el que fue creado el escenario: fútbol profesional y deporte amateur. A cambio, la entidad deportiva está en la obligación de dar mantenimiento y administrar de manera correcta.
Según Marcos Patiño, miembro del directorio de la FDA, “el estadio es de propiedad del Municipio y el Concejo Cantonal es el único que puede decidir qué hacer con el predio. Nosotros como FDA haremos respetar el comodato... No podemos romperlo porque para que eso suceda deben existir causales que están establecidas en el comodato. Sin embargo, aún no existe ningún comunicado oficial", dijo Patiño.
