La principal novedad del club guayaquileño es la ausencia del defensor Antony Robledo, quien se lesionó durante la práctica de los rojos del pasado miércoles realizada en el estadio La Fortaleza.
A criterio del DT Pizarro, el cuadro morlaco (octavo con cinco puntos) es un equipo complicado, en especial cuando actúa de local.
“El Deportivo Cuenca es un equipo muy ordenado y tiene jugadores de mucha experiencia, va a ser muy complicado”, expresó ayer el adiestrador antes del traslado de su escuadra hacia la capital azuaya.
“Intentaremos mantener el mismo rendimiento que mostramos frente al Mushuc Runa. No hay diferencia entre jugar de local o visitante”, agregó el entrenador ecuatoriano.
Pizarro indicó que está conforme con el plantel que tiene y por ello descartó la llegada de otro refuerzo.
“Es importante trabajar antes de un campeonato con una base de jugadores; eso permite no tener problemas mayores en el torneo”, manifestó el DT.
El equipo que dirige Paúl Vélez tendrá algunas variantes en su formación inicial, en relación con la fecha anterior, y una de sus principales novedades es la inclusión de Luis Bolaños.
El exfutbolista de Liga de Quito aseguró que está “listo” para jugar y a órdenes del cuerpo técnico morlaco.
“Si el profesor (Vélez) desea estaré listo para jugar 45 o 90 minutos, estoy bien física y anímicamente, y espero ayudar para que el equipo gane el compromiso”, precisó Bolaños en declaraciones a diario El Tiempo de Cuenca.
El estratega del club azuayo confirmó que el Chucho, como se lo apoda al jugador tendrá la oportunidad de jugar frente a los guayaquileños.