“Si pudiera usar la camiseta roja todos los días lo haría, el Cuenca es mi pasión”

Para Alejandra Guzhñay, de 22 años, el amor y la pasión por el Deportivo Cuenca es única. “Si pudiera usar la camiseta roja todos los días lo haría. Mi pasión es el Cuenca”, manifestó una de las hinchas más fieles del expreso austral. Alejandra dice que todo está listo para comenzar el año junto al “Cuenquita”. En la Noche colorada ya estuvo en el estadio Alejandro Serrano Aguilar, para conocer a los nuevos jugadores y este viernes nuevamente llegará dos horas antes del partido para, y desde la general sur, antigua “tribuna de niños” alentar antes, durante y después del partido.

Para la hincha cuencana, no hay distancia que le separe del expreso austral, ella vive en el barrio Primavera Alta, junto al colegio Militar, y dice que, cuando está en la Universidad de Cuenca, pues estudia enfermería, es más fácil llegar al estadio, pero cuando está en su casa sale lo antes posible para llegar a tiempo. “El problema es el retorno, pero hay modos para regresar”, dice Alejandra.

Inicios
Alejandra recuerda que la primera vez que llegó al estadio a ver, al ahora equipo de sus amores, fue cuando tenía seis años. “Mi mamá, Norma, me llevó junto a mi hermano y desde ese entonces nació la pasión por el Cuenca”, acotó.
Manifiesta que el amor por los camisetas coloradas es heredado, pues sus abuelos y su mamá son hinchas y desde ese entonces, gane o pierda el equipo siempre esta atenta, por la televisión, la radio, en el estadio y ahora por las redes sociales. No hay día que deje de conocer las novedades del plantel: los lesionados, expulsados, suspendidos...
Alejandra conoce a profundidad al Deportivo Cuenca, año tras años busca la manera de fotografiarse con los jugadores y el cuerpo técnico. Este año aún no lo ha hecho pero pronto lo hará.
En su habitación, el color rojo es lo que predomina, su edredón lleva el escudo del Cuenca, y por las paredes están ubicados: peluches, gorras, bufandas, fotos y más implementos. También tiene varias camisetas, todas autografiadas, chalecos, el libro conmemorativo que fue publicado en el 2013, llaveros, medallas y un sinnúmero de objetos. Hasta un CD que publicó la Crónica Roja, barra del Cuenca hace algunos años. “El CD me regaló un locutor de la Súper 949”, recuerda emocionada.

Cánticos
“Del rojo soy y el Cuenca es la droga de mi corazón, vos sos la alegría, vos sos la pasión, daría mi vida por verte campeón...”, es el cántico que recordó durante esta entrevista, aunque dijo saberlos todos los que se cantan durante un partido. “He estado en tribuna y preferencia, pero nada es igual que ver el cotejo desde la barra, acá es distinto, la adrenalina está durante los 90 minutos, en los otros lados, se canta a ratos; se sufre más”, comenta Alejandra entre risas y emoción.
Para terminar esta entrevista, la fanática del “Cuenquita” pide a los jugadores que este año saquen esa “espinita” que en los últimos ha tenido, quiere tener más alegrías. Las peleas por el descenso han sido muy fuertes, por lo que confía en que en este 2016, las cosas vayan a cambiar y el equipo estará entre los primeros de la tabla. “El equipo ha trabajado bien en la pretemporada, le he seguido desde Manta, además el profesor Aguinaga ha tenido todo el tiempo para trabajar con todos los jugadores. Queremos un nuevo campeonato”, sentenció Alejandra Guzhñay, una de las más fieles seguidoras del Deportivo Cuenca.

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