Deportivo Cuenca fue fundado el 4 de marzo de 1971. Hoy 45 años. En todo este tiempo destacaron varios personajes como Alejandro Serrano Aguilar, primer presidente del Club.
Serrano evocó algunos recuerdos que vivió con Deportivo Cuenca, a través de una entrevista que concedió a Diario El Mercurio.
Como anécdota: cuando discutíamos la formación del Club, con dificultades y problemas, etc, uno de los entusiastas del fútbol profesional fue Antonio Chamón, gerente de Filanbanco en ese entonces. En aquellos tiempos estaba metido a fondo en el sistema de canalización de la ciudad, una obra básica de gran trascendencia para la ciudad y recuerdo que Antonio me dijo: Nadie se acordará de la canalización en el futuro; en cambio, la fundación del Deportivo Cuenca permanecerá en la memoria de los hinchas. Nunca me olvidaré de esas palabras proféticas.
La primera manifestación se produjo en México. Asistí al Mundial de Fútbol, donde coincidimos con Polibio Vásquez y Alfredo Peña para observar el partido Alemania-Inglaterra.
Salimos emocionados y fuimos a la plaza central de la ciudad de León y ahí surgió la idea de crear un equipo profesional en Cuenca. Había que madurarla. Estamos hablando de junio de 1970, yo me hice cargo de la Alcaldía el 1 agosto.
Me encontré con muchas dificultades. El fútbol profesional estaba integrado únicamente por cuatro provincias: Guayas, Pichincha, Manabí y Tungurahua. No había cupo para más. Un directivo de la AFNA me dijo: Nosotros no queremos saber nada de otro club porque cuando viene a jugar un equipo de provincia en el Atahualpa, ni las lluvias vienen al estadio (…) Me dejó frío.
Hablé con Galo Martínez, ministro del gobierno de Velasco Ibarra. Él tomó a pecho el asunto y trabajó con mucha decisión y afecto. Recibí una llamada y me dijo hemos avanzado bastante, a tal punto que tomaron la decisión de sesionar en Cuenca. Es así que les ofrecí el Salón de la Ciudad.
Aprovechando la circunstancia pedí la palabra y propuse que Azuay sea considerado en el fútbol profesional. Lo aceptaron y también se incluyó a Chimborazo. Luego entraron otras provincias.
Me permití hacer una convocatoria por la prensa para que concurrieran personas entusiastas por el fútbol profesional y que nos ayuden. Asistieron pocos porque había que conseguir dinero, no era solo cumplir los aspectos legales. El acta de fundación se firmó el 4 de marzo de 1971. Posteriormente fundamos AFA porque como Club no podíamos ingresar por si solos al fútbol profesional. Moví a otros clubes como Liga de Cuenca para que formen parte del proyecto.
Tuvieron la gentileza de designarme presidente, de suerte que simultáneamente ejercí la dos presidencias: Deportivo Cuenca y AFA. Anteriormente me desempeñaba como presidente del Comité de Fútbol de la Federación Deportiva del Azuay y luego también pasé a ser presidente.
Antes no había césped, se jugaba en cancha de tierra. Los equipos de afuera no querían venir y con justa razón. Cuando llovía teníamos que madrugar a sacar el agua acumulada.
Fui electo diputado en 1962. Conseguí una partida presupuestaria de 300.000 sucres para la siembra del césped, lógicamente a órdenes de la Municipalidad, en ese entonces presidido por Severo Espinoza.
Construimos primero un dren tipo francés para evacuar las aguas fácilmente cuando llueva; después las capas de áridos y la superficie de tierra vegetal. El Municipio tuvo que importar semilla de césped desde Inglaterra.
Había mucha expectativa en una ciudad pequeña por consiguiente una cosa de esas era muy importante, pero para sorpresa de todos empezaron a darse coles y lechugas. Le gente se burló, no faltó quien me gritó en el parque: ¡Venderás las coles! ¿qué fue de las lechugas? (…) El Municipio enseguida hizo el respectivo reclamo y los proveedores dieron la siguiente explicación: Efectivamente existen semillas de estas leguminosas porque nacen antes que las gramíneas, entonces los pájaros se comen las leguminosas y dejan que crezca la gramínea. Después, para que vea usted la importancia del evento, se invitó al Peñarol para que juegue el partido inaugural del césped con Liga de Quito.
Al comienzo con el estadio muy precario. Las localidades para los partidos del domingo, 11:00, se agotaban muy temprano, de suerte que acudíamos a las 05:00 para hacer cola (fila) y tomar asiento. La tribuna era de madera y cuando gritaban un gol parecía que iba a caerse, después se reestructuró todo el estadio.
Antes no manejábamos presupuestos, simplemente conseguíamos el dinero les pagábamos. El estadio se llenaba siempre.
Para arrancar con el Club hicimos una telemaratón en Telecuenca, el portavoz fue Romeo Moscoso. La gente aportó como usted no tiene idea, de tal manera que resultó un espaldarazo económico para el Club.
Hoy en día hay que respaldarle a la directiva porque es el equipo de la ciudad.
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