Cosenza, DT del Cuenca: Me voy a tatuar la estrella si conseguimos el objetivo

Después de dos partidos como director técnico interino del Deportivo Cuenca, Gabriel Cosenza fue oficializado ayer en el cargo y tendrá como asistentes a sus compatriotas Luis García y Alejandro Albornoz con quienes ya trabajó en Nueva Chicago. El cuencano Roberto Vanegas continuará como preparador físico al igual que Robin Pico como preparador de arqueros. El profesor Juan Carlos Elías retomará su rol como coordinador de las divisiones formativas y será el nexo para que los canteranos se promocionen en el primer plantel.

“Hay que trabajar más y mejor para poder llegar y cumplir el sueño de todos que es retornar a una competencia internacional”, mencionó Cosenza previo a la entrevista concedida a Diario El Mercurio, en la que en su despedida confesó que gusta de la milanesa con papas fritas y si es por la música, se adapta a todo género porque la música es alegría y cada letra tiene su razón.

-¿Uno se levanta día tras día a enfrentar retos, esperaba usted esto? Uno siempre sueña, pero cuando te toca, vivís un sueño despierto así que estoy feliz de la vida, llegó el momento, ahora hay que trabajar y demostrar que uno está a la altura de las circunstancias.

-¿Cuáles son sus características como entrenador? Yo me muestro tal cual soy, no actuó más allá del cargo que uno tenga. Uno tiene muchos años de vestuario por haber sido jugador, entonces sabe cómo le puede llegar al jugador, de qué manera se le puede hablar y cómo hacerle sentir de la mejor manera. Nuestra idea es potenciar a cada uno de los jugadores para que rindan en su máximo esplendor y poder entre todos cumplir sueños.

-¿Cuál es su estilo de juego? Me gusta un estilo de mucha presión y posesión del balón pero bueno, hay que trabajarlo, entendemos que tenemos un plantel capacitado para poder hacerlo así que vamos a trabajar para poder cumplir ese objetivo.

-¿Se ha contratado a dos delanteros, cuál es la intención? Tener recambios, tenemos una segunda etapa bien difícil, sabemos que van a querer pelear todos arriba, sabemos que cada partido va a ser una batalla y la queremos ganar todo el tiempo.

-¿Cambia algo el hecho de haber sido jugador del Deportivo Cuenca y ahora es su director técnico? Desde aquel día que me tocó irme de acá siempre soñé con volver en el cargo que me toque. Vine en enero como director deportivo ahora me toca ser el director técnico, bueno, hay que proyectarse, no voy a ser presidente, eso que quede claro (sonríe). Me gusta esta función y la que estaba ejerciendo en la cual voy a seguir colaborando porque me parece que el club está sobre cualquier nombre y sobre cualquier puesto de trabajo.

-¿Cómo es la convivencia con el profesor Juan Carlos Elías quien en su momento fue su entrenador? Con Juan Carlos siempre hemos tenido una relación bárbara más allá que como jugador siempre me regañaba porque yo supuestamente metía mucha patada pero no era así, era muy calidoso como dicen acá.

– ¿Cómo es el profesor fuera de la canchas? Soy una persona muy hogareña, me gusta mucho estar con mis hijas, con mi señora (María Laura Casella). Ahora tuvieron que volver para Argentina por el tema escolar pero la idea es que vengan y se instalen acá, va a depender de nosotros y todo el esfuerzo que hagamos para poder cumplir el sueño de vivir un largo tiempo en Cuenca.

– ¿A quién admira? Me gusta Pep Guardiola, el Loco Bielsa, yo siempre voy sacando un poquito de cada uno, pero tengo mi propio estilo. El otro día me cargaban porque me decían que parecía (Pablo) Repetto cuando dirigí, ojalá pueda ser también un poquitito como Repetto que ha llegado a una final de Libertadores.

-¿Usted decía que no se debe fijar mucho en resultados sino en un proceso? Sí, porque cuando haces un proceso a largo tiempo los resultados vienen por decantación, así que hay que tener paciencia y trabajar mucho para lograr los objetivos.

-¿Aparte del fútbol que le gusta al profesor? Yo soy muy tranquilo, me gusta tomar mate, el equipo de mate lo llevo a todos lados; me gusta charlar, escuchar música, mirar películas, me gusta leer mucho también, pero más que nada estar con la familia.

-¿Los tatuajes en los brazos se los hizo en su época de jugador? No, fue de viejo (sonríe). Sobre gustos no hay nada escrito, decimos en Argentina… (En los tatuajes) tengo las iniciales de los nombres de mis hijas, sus fechas de nacimiento, algunas frases, por una cuestión de gustos, de amor hacia la familia… me voy a seguir tatuando eso sí, me voy a tatuar la estrella si cumplimos el objetivo, ojo, pero vamos paso a paso…

-¿Es un técnico muy jovial, otros incluso demuestran su seriedad en la vestimenta? Yo soy un cachivache, me visto como puedo, le meto color, no importa. El fútbol es un juego, con la responsabilidad que amerita hay que tomarlo con diversión. Siempre les digo a los chicos tienen que sonreír, a mí me tocó llegar a primera división sin darme cuenta que tengo que llegar a primera división porque iba a los entrenamientos sonriente y hoy lo sigo haciendo más allá que a veces si me van a ver serio, enojado, pero la esencia es siempre mantener una sonrisa, que es lo que te mantiene vivo.

-¿Y el arete en la oreja (izquierda)? Yo digo que el cuerpo es un disfraz que nos dan y hay que llevarlo de la mejor manera. Cada uno tiene su estilo, el aro lo uso hace mil años, no lo voy a cambiar ¿Por qué? por tener un cargo de director técnico, no…

-¿Si no hubiese elegido el fútbol, qué hubiese sido? Cantante (sonríe), canto muy mal pero no importa… Ese don lo tienen mis hijas así que mañana cuando me retire viviré de las canciones de ellas… tengo mellizas de 10 años Mía y Lola y una chiquita de seis, Alma, ellas cantan, bailan; no tenemos una pelota en casa pero son hinchas del Cuenca, estuvieron en la Noche Colorada… sufren cuando al equipo le va mal y lo disfrutan cuando gana.

-¿El momento más duro que le tocó afrontar? En lo futbolístico fueron las lesiones que tuve en las rodillas de las cuales hoy tengo artrosis en una de ellas. Me operé acá en el 2001 y fue algo muy loco porque me habían expulsado. Llegué a Cuenca desde Esmeraldas y tenía el menisco roto. Me operaron y a los 20 días ya estaba jugando, eso después me trajo una artrosis en la rodilla derecha, menos mal, porque yo era zurdo.

-¿Algún apodo especial? Acá me decían cocolo o cacique, no sé por qué, a los líricos les dicen caciques ¿no?, y cocolo, bueno, yo me afeito la cabeza porque me resulta más cómodo… en el vestuario recién los muchachos me agarraron y me dicen profe, profe; no, yo soy Gaby, para todo el mundo soy Gaby, a mí un rótulo no me cambia, la esencia no se cambia. Yo nací de esta manera, por qué voy a cambiar, claro que tengo que tener la seriedad del caso, no es que vivo de joda, pero me gusta ser alegre para poder transmitirles alegría a los jugadores.

– Su mensaje a la hinchada y a los jóvenes Agradecerles infinitamente el apoyo. Desde que llegué acá en el 2001 el apoyo fue terrible y ahora que me tocó venir de nuevo la gente me demuestra cariño por eso siempre digo que soy argentino de nacimiento y cuencano por adopción. A los nenes les digo que sueñen. Yo tengo un tatuaje que está en portugués y dice que si lo puedes soñar, lo puedes lograr. Hay que soñar, tener paciencia, creer en lo que uno puede dar y brindarse 100 % que a la larga los sueños se cumplen.

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