Una vez más Raúl Becerra se convirtió en la figura y dio la victoria a un ansioso Deportivo Cuenca para ubicarlo tercero en la tabla acumulada en zona de repechaje de la Copa Libertadores 2017.
Anoche, los rojos jugando en su estadio, Alejandro Serrano Aguilar, derrotaron 3-1 al Delfín que vino presionado en busca de puntos, pero que con la derrota se comprometió más con el descenso.Y desde el primer minuto, el cuadro local salió decidido a irse arriba en el marcador. Sin embargo, los jugadores estuvieron ansiosos y las llegadas no fueron condundentes, pues, enfrente estuvo un equipo replegado en su cancha. El Cuenca era dueño de la pelota, la hacía rodar por todo el campo de juego, pero la última jugada no llegaba y el golero Pedro Ortiz pasó desapercibido.
A la media hora de juego, la poca hinchada colorada que llegó al estadio miraba como su equipo no tenía ideas; solo ímpetu, con el mismo onceno y sistema que fue humillado en la fecha anterior a manos del Barcelona, dispuesto por el técnico Gabriel Cosenza.
Pese a todo, el expreso austral tuvo su premio, merced a sus ganas. Marco Mosquera, movedizo jugador rescató un esférico frente al sector de tribuna sur, corrió hacia el medio del arco rival y sacó un potente disparo a media altura, el golero Ortiz no pudo contener y al rebote, Raúl Becerra estuvo atento y con disparo cruzado anotó el primer gol colorado.
Al inicio de la segunda mitad del partido, el Cuenca estuvo a punto de aumentar cifras, Walter Chalá impactó el esférico en el vertical izquierdo, Luis Saritama pescó el rebote y lo mandó al fondo de las redes, pero fue anulaudo por fuera de juego. De inmediato, a la contra el Delfin aprovechó los espacios dejados en la zaga roja y Maximiliano Barreiro con disparo cruzado empató el partido. Balde de agua fría para los rojos.
El Cuenca desordenado ante un rival que decidió atacar. A los 58 minutos gracias a una jugada trabajada, Saritama levantó un tiro libre para que en el segundo palo, Becerra de cabeza empuje la pelota al fondo de las mallas. El cuadro rojo respiraba, aunque sus hinchas se “comían las uñas”, no entendieron los cambios efectuados, Rubén Cangá de improvisado ocupó la banda derecha, pero este, por lesión fue sustituido por Walter Zea (volante). El rival atacaba, buscaba el empate y así, tal cuál le igualó, los camisetas coloradas ampliaron el tanteador.
A los 83 minutos Chalá corrió solo por la banda, ingresó al área rival, levantó la cabeza y cedió el esférico a Becerra para que marque el gol del respiro morlaco. No huvo tiempo para más y con el 3-1 se terminó el partido. Los rojos terminan terceros en la acumulada y pelean por la Libertadores, mientras que el Delfín es penúltimo y está en zona de descenso.
No comments:
Post a Comment